CONTROL QUÍMICO DE CIRCUITOS DE AGUA SOBRECALENTADA
Muchas plantas de cogeneración utilizan como fluido caloportador agua caliente o agua sobrecalentada. Se trata en general de circuitos cerrados sin purgas ni aportaciones, por lo que el tratamiento y control químico de ese agua suele ser muy fácil.
Normalmente estos circuitos se rellenan con agua desmineralizada. Lógicamente, la conductividad de este fluido es muy baja. El problema que surge es que suele poseer propiedades corrosivas, por el valor de potencial redox. El tratamiento del agua de los circuitos cerrados consiste, pues, en evitar esas características corrosivas del agua y pasivar las superficies metálicas de los componentes del circuito. El tratamiento habitual consiste en dosificar un inhibidor de corrosión y un biocida, si fuera necesario. Cuando hay riesgo de congelación se añade un anticongelante como etilenglicol o propilenglicol.
Como inhibidores de corrosión destaca al Molibdato (contenidos necesarios de 400-600 ppm), Nitrito (contenido necesarios 600- 1200 ppm) o conjunciones de los anteriores.